jueves, 12 de enero de 2017

HAY UNA LEGION…


Se robaron todo es ya como el Ave María que el Dios mercado ordena rezar para mandar al quinto infierno a los infieles; para regocijo del alma de los sanos; para abrir las puertas de los Cielos. Se robaron todo repite una legión que marcha con la mente en blanco y la mirada perdida, al son de los órganos de los templos mediáticos con añoranzas inquisitivas, y sed de hoguera para los pecadores.

A quién le importa que en 2003, cuando llegaron los que se robaron todo, las reservas del Banco Central eran de 14.119 millones de dólares, y  que el 9 de diciembre de 2015 último día de gobierno de los que se robaron todo se contaban 25.080 millones de dólares, un 77% más, habiéndose pagado en esos doce años 145.658 millones de dólares de deuda externa con las reservas, sin financiamiento ni endeudamiento externo. A nadie, porque lo único que importa es que los que se robaron todo, se robaron todo.

Menos interesa que en mayo de 2003 cuando asume Néstor Kirchner y comienza la era de los que se robaron todo, el peso de la deuda externa sobre el Producto Bruto Interno era del 164%, es decir estimados oradores del se robaron todo, que debíamos más de una vez y media lo que suman todos los bienes y servicios que producíamos en un año. Después de robarse todo y entregar el gobierno a los que llegaron para instalar el bienestar, el 9 de diciembre de 2015, el impacto de la deuda externa sobre el Producto Bruto en Argentina era del 33%, es decir que los que se robaron todo, no solo incrementaron reservas y pagaron deuda sin endeudamiento, sino que redujeron el peso de la deuda sobre la producción de bienes y servicios del más de una vez y media a un tercio. Pero a quién le importa si el Ave María dice que se robaron todo.

Bueno, pero si las reservas aumentaron y la deuda disminuyó, seguro que los que se robaron todo dejaron una Anses devastada, quebrada, arruinada. Veamos. Cuando asume Néstor Kirchner los fondos de Jubilaciones y Pensiones estaban en manos de los Bancos, por medio de las AFJP. A fines del 2008, los que se robaron todo, y para robarse todo, estatizaron esos fondos, y los pasó a administrar el estado. Las AFJP, luego de quince años de administrar esos fondos le transfirieron a la Anses un total de 98.083 millones de pesos, los que conformaron el Fondo de Garantía de Sustentabilidad. Al 9 de diciembre de 2015, en solo ocho años ese Fondo de Garantía de Sustentabilidad era de 664.029 millones de pesos. Esto dice que los que se robaron todo, en ocho años incrementaron el fondo en un 577%, habiendo otorgado más de 3 millones de nuevas jubilaciones y 1,5 millones de nuevas pensiones. Pero claro, eso a nadie le importa porque, se robaron todo.

Se robaron todo sigue repitiendo a voz de cuello como zombis una legión de idiotas, a los que les acaban de despedir de su trabajo a sus hijos. Se robaron todo, repite la misma legión por quienes sus hijos tuvieron trabajo, vivienda, auto y bienestar. Se robaron todo gritan a los cuatro vientos los idiotas que acaban de perder la mitad del poder adquisitivo de sus ingresos. Se robaron todo aúllan en defensa de quienes pregonan que las mayorías empobrecen a partir de las medidas del nuevo gobierno por la pesada herencia que dejaron los que se robaron todo. Esa herencia que ustedes acaban de leer y que está dicha por organismos internacionales sin complicidades con los que se robaron todo.

¿Se robaron todo?, ¿O a una legión de idiotas les robaron la capacidad de pensar, de discernir, de percibir que mientras gritan se robaron todo, están cargando la cruz sobre la que serán izados y los clavos con los que terminarán ejecutados por quienes les dictan el Ave María profano, mientras les están robando presente y futuro, a ellos, sus hijos y sus nietos?

Si, una legión de idiotas a los que les están robando todo, mientras los hacen repetir como idiotas que son, se robaron todo, se robaron todo, se robaron todo.

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